El novio de mi hermana. Cap1.

Capítulo 1:

La alarma del despertador sonó. Estiraste el brazo, e hiciste varios esfuerzos para apagarlo, pero sólo lograste tirarlo al piso. De repente, pareció como que toda la familia se había levantado de un salto. Y así fue. Todos vinieron corriendo a tu cuarto, todos menos Tomi, y esa gente con tu misma sangre cantó:
-¡Qué los cumplas feliz! Que los cumplas feliz, que los cumplas ____ que los cumplas feeeeeeliz!- entonaron a coro, con sueño, y desafinado. Te abrazaron uno por uno, y cuando fue el turno de tu hermana, te dijo al oído:
-Tengo una sorpresa para ti, hoy, linda.-
-¿Me llevas?- preguntaste.
- Bueno, esa era una, pero tengo otra MUCHO mejor.
Tú sólo reíste, y la abrazaste. De repente, tu hermano llegó corriendo con una torta, yla mitad de las 16 velas apagadas.
-¡Feliz cumpleaños,____! No tengo dinero para comprarte nada, pero si quieres, te puedo regalar mi media de la suerte.
- No hace falta que me des una media que no lavaste hace 4 años, para demostrar que me quieres. Con un abrazo basta. – le contestaste, y te estrechó entre sus brazos.
Luego de comer un pedazo de torta, tú y Luna, partieron a la escuela. Al llegar, en la puerta estaban esperándote, David y Alma.
-¡Feliz cumpleaños! ¿Qué tal el comienzo del día?- te interrogó, tu amiga, sonriente, te envolvió en sus brazos.
-Genial.- respondiste.
- Feliz cumple, mi reina. – David te abrazó, y te dio un beso en la mejilla. Luego sacó de su espalda, un collar con un corazón partido en tres, y si los juntabas, completabas la palabra “Best Friends Forever”.
En el pasillo viste algo muy extraño. Tu hermana se estaba besando un chico muy guapo ¿Espera?¿Tu hermana?¿La inteligente de la familia, la futura economista, y la ñoña, besándose con un chico precioso en el pasillo?¿A caso esa era la famosa sorpresa? Porque si lo era, había surtido su efecto. Aunque no se entendía qué tenía que ver con tu cumpleaños.
*Flash Back*
-Tienes que desenvolverte más, Luni. Hazme ese favor.
-____ yo soy como quiero, y así me gusta. – te agarró de los hombros.- No me trates de cambiar porque no lo haré.
-Aunque sea consíguete un novio…- aconsejaste.-
- Eso no es lo que más me preocupa. ¿O a caso quieres que sea una rebelde embarazada, y perder toda mi adolescencia? No tengo novio, porque no he conocido a un chico que me interese de verdad-
-Bueno, genial, no te daré más consejos sobre qué hacer.
- ¡POR FIN ENTENDISTE!- te gritó.
Saliste bufando de la cocina. Estabas enojada.
*Fin de Fash Back*
Aquel chico debía ser realmente interesante. Porque muchos chicos se habían enamorado de tu hermana, y ella, pues, no les había dado ni la hora.
Lo que más te sorprendió fue la apariencia de ese chico. Siempre imaginaste a alguien más forzudo. Pero él llevaba anteojos nerds, que tapaban sus hermosos ojos marrones, su cabellera de color bronce, hipnotizaba a cualquier chica, y era simplemente perfecto. Pero no era un gigante, musculosísimo, aunque se notaba que hacía ejercicio por sus músculos en los brazos, y sus tonificaciones ocultas, que tu hermana tocaba de vez en cuando. Diu! Esa imagen daba náuceas.